Por Karina Pérez Galindo, Associate Director de Robert Half

No cabe duda que las circunstancias actuales son muy complejas para la gran mayoría de las personas. Ello, porque la crisis sanitaria ha impactado duramente la economía nacional y mundial, generando una contracción de la oferta y el dinamismo en el mercado del trabajo.

Por ello, a menudo escucho consultas u opiniones respecto de qué sentido tendría el buscar trabajo cuando no hay muchas ofertas y el contexto económico es complejo. Pues bien, soy partidaria de mantener una búsqueda activa de trabajo, incluso en las actuales circunstancias.

En primer lugar, debemos tener en cuenta que la búsqueda de trabajo es “un trabajo en sí mismo” y requiere perseverancia, tiempo y dedicación. En la gran mayoría de los casos y en circunstancias “normales”, casi nadie consigue trabajo en su primera entrevista o postulación. De hecho, las estadísticas cifran en torno a los 3 – 6 meses el promedio que toma una recolocación laboral, en un contexto normal. 

«Mantener una búsqueda activa de trabajo ayudará a desarrollar las habilidades necesarias para enfrentar un proceso de selección, a preparar correctamente un CV y a desarrollar una buena BD de headhunters, portales y contactos que nos pueden abrir oportunidades en un futuro»

Por lo anterior, mantener una búsqueda activa de trabajo ayudará a desarrollar las habilidades necesarias para enfrentar un proceso de selección, a preparar correctamente un CV y claro, a desarrollar una buena BD de headhunters, portales y contactos que nos pueden abrir oportunidades en un futuro.

Otra de las razones para mantenerse activos en la búsqueda, es porque pese al pesimismo y la incertidumbre que pueda existir actualmente, lo cierto es que estamos en un contexto complejo, pero transitorio. De hecho, distintos informes y expertos, como el IPoM de septiembre del Banco Central de Chile, están dando cuenta de que la economía comenzaría a reactivarse en los próximos meses, incluso bajando las estimaciones previas de contracción económica. De hecho, a medida que se han ido bajando las cuarentenas y se ha logrado mejores indicadores en la gestión de la crisis sanitaria, hemos ido viendo una reactivación de los procesos de selección, por parte de las empresas.

Adicionalmente, y si bien es claro que la competencia por los cargos disponibles es mucho más dura al existir más oferta de profesionales, al participar de un proceso, además de ganar experiencia, se nos pueden abrir oportunidades a futuro. Sí, porque en mi experiencia como headhunter, muchas veces me ha tocado entrevistar a muy buenos candidatos, pero que por requerimientos de la empresa que encargó la búsqueda o porque otro candidato se ajustó un poco mejor al perfil, no se han quedado con el cargo. En esos casos, lo que se suele hacer es mantener ese perfil “a mano” y cuando aparecen nuevas oportunidades se les contacta. 

 

«No es una pérdida de tiempo el postular y no quedar seleccionados, es una inversión en adquirir experiencia, entrenarse para futuros procesos y en lograr quedar en la BD de los headhunter o seleccionadores»

Por lo tanto, no es una pérdida de tiempo el postular y no quedar seleccionados, es una inversión en adquirir experiencia, entrenarse para futuros procesos y en lograr quedar en la BD de los headhunter o seleccionadores. A propósito, hace alguna semanas escribí un artículo respecto de cómo trabajamos los headhunters y cómo podemos ser aliados profesionales mucho más allá de un proceso de selección puntual: Headhunters como aliados en el desarrollo profesional.

Por último, junto con persistir y entrenarse en la búsqueda de empleo, es muy importante aprovechar el tiempo para trabajar en el desarrollo o fortalecimiento de habilidades que están adquiriendo mucha relevancia, especialmente a partir de los cambios que se están dando producto de la contingencia y de la llamada industria 4.0. Entonces, mi llamado es a no decaer, no bajar los brazos y mantener una actitud positiva, aun cuando las circunstancias siguen siendo complejas… no olvidemos que todo es transitorio.